En la Argentina, entre 1880 y el 1930 instaló el “Modelo
Agroexportador”. En una explicación simplista, podemos decir que este
sistema constaba en producir materia prima de origen agrario (trigo,
carne, etc.) y vendérsela a los países europeos industrializados. Luego,
la Argentina importaba de estos países los productos ya manufacturados.
En
el plano futbolístico, se podría decir que estaría pasando algo
similar. Argentina, un país productor de jugadores de fútbol, los vende a
Europa apenas formados, y los repatria ya campeones del mundo.
Con
la incorporación de David Trezeguet a River Plate, en fútbol argentino
se va a dar el curioso caso de contar con 2 jugadores campeones del
mundo con distintas selecciones y ninguna es la tierra que los vio
nacer.
El caso de Trezeguet, surgido de las inferiores de Platense
y campeón del mundo con Francia en 1998, se suma al de Mauro
Camoranesi, surgido de las inferiores de Aldosivi y campeón del mundo
con Italia en el 2006, actualmente jugando para Lanús.
Argentina,
un país con una superficie de 2.780.400km² en donde movés una piedra y
sale un futbolista, importa campeones del mundo. Hay algo que se está
haciendo mal.

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